Sostenibilidad en arquitectura
La economía circular es un modelo basado en la reutilización, la reparación, la remanufacturación y el reciclaje de los productos.
La economía verde es aquella que reduce los riesgos ambientales y es eficiente en el uso de los recursos. Es un modelo que integra la dimensión social y la conservación de los ecosistemas.
¿Cómo actuar de manera sostenible?
El impacto del ser humano no debe superar la capacidad de carga de la naturaleza.
El uso de recursos renovables no debe superar su velocidad de regeneración.
El uso de productos no renovables debe compensarse con la producción de productos renovables que a largo plazo los sustituirán.
Las emisiones al medioambiente no deben superar la capacidad de absorción de los receptores.
Análisis del ciclo de vida
El ACV estudia el impacto ambiental de un producto desde su producción hasta el final de su vida útil. Para ello se debe conocer el gasto energético y la contaminación que afecta al medio durante el proceso de su utilización.
-Extracción de materias primas para su fabricación.
-Proceso de fabricación.
-Transporte del producto.
-Puesta en obra y uso.
-Su final.
La huella ecológica evalúa la cantidad de territorio necesario para generar los recursos biológicos consumidos y absorber los residuos que una determinada actividad necesita y produce.
La regla de las tres Rs
-Reducir el consumo de materiales.
-Reutilizar materias ya existentes.
-Reciclar, darle un nuevo uso a algo.
Edificios saludables
-Las proporciones de los locales.
-La relación entre la altura, ancho y largo de las estancias.
-El clima cromático determinado por el color de las superficies externas e internas.
La relación con la naturaleza influye positivamente sobre las funciones nerviosas superiores, determinando sensaciones de bienestar.
Síndrome del Edificio Enfermo, conjunto de síntomas que pueden degenerar en un estado de enfermedad incluso crónico.
Impacto de la arquitectura en el hombre
La energía y la salud del ser humano se ven influidos por el entorno en el que vive.
Los elementos principales del ambiente climático que influyen sobre el confort humano son:
-La temperatura del aire.
-La radiación, emisión térmica.
-El movimiento del aire.
-La humedad relativa.
Hay condiciones del terreno que son fundamentales en la interacción del edificio:
-La temperatura.
-El soleamiento.
-Los vientos predominantes.
-Las precipitaciones.
-La nieve.
-La humedad y la presión del vapor.
Diseños sostenibles
-La bioarquitectura tiene como finalidad minimizar los impactos negativos de las construcciones ya sea en el medio ambiente o con respecto a la salud de sus ocupantes. Son edificios centrados en las personas de bajo consumo energético, que usan materiales no nocivos y reciclables.
-La arquitectura bioclimática representa un método de trabajo que empezando por un estudio de preliminares de las condiciones climáticas del emplazamiento dirige el proyecto para conseguir objetivos de sostenibilidad y bioarquitectura.
Soluciones constructivas
El control del microclima en un edificio se puede lograr principalmente con estrategias pasivas y sostenibles. Algunas de las más efectivas incluyen bloquear la irradiación solar directa con protecciones en las ventanas, orientar adecuadamente el edificio para aprovechar o minimizar la radiación solar, y favorecer la ventilación cruzada con una disposición adecuada de aberturas. Además, el uso de acabados claros refleja la radiación solar y la inercia térmica de los materiales como el concreto ayuda a mantener temperaturas estables. Estas medidas mejoran el confort térmico y reducen la dependencia de sistemas activos, favoreciendo la eficiencia energética.
Materiales
Los materiales tradicionales usados en la arquitectura, como la piedra, madera, adobe o barro, ofrecen ventajas en términos de salubridad y bienestar, como la regulación de la humedad y la creación de ambientes térmicamente confortables. Sin embargo, muchos de estos materiales naturales son tratados con sustancias químicas para mejorar sus propiedades, lo que puede generar riesgos para la salud. Por lo tanto, es importante tener en cuenta los tratamientos a los que se someten estos materiales para asegurarse de que no afecten negativamente la calidad del aire o el bienestar de los ocupantes.
Conclusiones
El biomorfismo, aunque a menudo se considera una opción coherente con la bioarquitectura, no garantiza una verdadera esencia bio en un diseño. Las formas, materiales y técnicas tradicionales no son necesariamente antinaturales, y su uso no debe reducirse a un enfoque estético o superficial. Además, la globalización de soluciones constructivas sostenibles, aplicadas indiscriminadamente en diversos contextos, no tiene en cuenta aspectos culturales, materiales locales o las condiciones ambientales específicas de cada lugar, lo que limita su efectividad.
El uso de materiales naturales por razones meramente decorativas o de eficiencia energética sin considerar su adecuación funcional o su impacto global a lo largo de la vida del edificio refleja una visión limitada de la sostenibilidad. Para lograr una sostenibilidad real, es esencial tener en cuenta no solo el ahorro energético durante la vida útil del edificio, sino también el coste energético asociado a su construcción, mantenimiento y el impacto ambiental durante todo su ciclo de vida.